Por Cecilio Panella
“Juro por Bolívar, por Sucre, por la memoria eterna de nuestro comandante eterno Hugo Chávez… Lo juro por la historia, lo juro por mi vida”, pronunció Nicolás Maduro el juramento de toma de posesión del cargo de presidente, frente al titular de la Asamblea Nacional, Jorge Rodríguez.
El heredero político de Hugo Chávez al frente de la República Bolivariana de Venezuela, juró este viernes para su tercer mandato de seis años, para el período 2025-2031.
«Si estamos aquí es porque el Estado venezolano, ejerciendo su derecho a la legítima defensa frente a una conspiración mundial evidente del poder de los Estados Unidos y de sus satélites y esclavos, convirtieron la elección de Venezuela en una elección mundial, y se la ganamos«, sostuvo Maduro.
También apuntó contra Joe Biden, presidente de los Estados Unidos: «El pueblo de Venezuela le ganó al imperialismo y el gobierno saliente de Estados Unidos no sabe cómo vengarse«.
El cubano Miguel Díaz-Canel y el nicaragüense Daniel Ortega fueron dos de los presidentes presentes en la ceremonia, además del titular de la Duma rusa (Cámara de Diputados), Viacheslav Volodin, enviado especial del presidente Vladímir Putin.
¿Urrutia, otro Guaidó?
Finalmente, el ex candidato presidencial opositor Edmundo González Urrutia no viajo a Venezuela, como había prometido, para jurar como presidente.
“Maduro quería hacer conmigo en el aire lo mismo que hizo con Machado”, señaló el dirigente exiliado en España, y sentenció: «Maduro se autocoronó dictador«.
«Sigo trabajando las condiciones para mi ingreso a Venezuela y para asumir como lo manda la Constitución y me ha ordenado el pueblo. Represento la voluntad de casi 8 millones de venezolanos dentro de la patria y otros a los que se les impidió votar en el extranjero», afirmó González Urrutia.
En la misma sintonía que el ex candidato presidencial, la principal referente de la oposición, María Corina Machado, había dicho que ella misma le pidió al presidente electo que no viajara a Caracas, donde tenía planeado hacerse cargo del Ejecutivo con el respaldo de los votos.
«Su integridad es fundamental para la derrota final del régimen y la transición a la democracia«, explicó Machado. Y profundizó: «Edmundo vendrá a juramentarse como presidente constitucional de Venezuela en el momento correcto, cuando las condiciones sean las adecuadas«.
Inmediatamente, el papel de González Urrutia en la situación que vive Venezuela fue comparada con la de Juan Guaidó.
Entre 2019 y 2022, el diputado opositor Juan Guaidó se juramentó como presidente encargado de Venezuela con un importante reconocimiento internacional (Incluido el gobierno de Mauricio Macri). Pero resultó una asunción simbólica, debido al que los hilos del poder no estaban en sus manos.
Su figura perdió rápidamente peso. En enero de 2021, la Unión Europea dejó de reconocerlo como presidente interino. En diciembre de 2022 perdió el apoyo de la mayoría parlamentaria y se suprimió la figura de gobierno interino, derivando en el cese de su mandato. Después de eso, Guaidó abandonó el país.
Estados Unidos sanciona
A 10 días de la llegada de Donald Trump, EE.UU. calificó la jura de Maduro de “ilegítima”, elevó la recompensa para su captura y amplió las sanciones.
Ante la solidificación del gobierno de Maduro, la administración Biden elevó la recompensa para la captura de Maduro y el ministro del Interior, Diosdado Cabello, a 25 millones de dólares. Y agregó una nueva recompensa de 15 millones de dólares contra el ministro de defensa, Vladimir Padrino López.
Pero la Casa Blanca decidió archivar por ahora otras medidas más duras, como revocar la licencia especial otorgada a la energética Chevron para extraer petróleo, o reimponer un embargo total a las ventas de energía de la nación caribeña.
En el horizonte, no obstante, aparecen eventuales nuevas sanciones con la llegada de Trump, que en su primer gobierno impuso un embargo petrolero.
Milei, sádico social
Maduro calificó al presidente argentino, Javier Milei, de “nazi sionista y sádico social” y enmarcó al libertario en la «extrema derecha».
«La extrema derecha encabezada por un nazi sionista, un sádico social llamado Javier Milei, junto al imperio norteamericano, cree que le puede imponer a Venezuela un presidente», sentenció en el discurso.
El jueves, el gobierno de Milei expresó su «extrema preocupación por el ataque criminal del régimen chavista contra María Corina Machado«, en medio de la denuncia de detención tras la manifestación opositora, luego desmentida por el gobierno venezolano.
«El presidente Javier Milei convoca a los demás gobiernos de la región a repudiar el ataque contra Corina Machado, y a exigir el fin del régimen socialista que ha dejado a millones de venezolanos en la pobreza, exiliados o dependientes de las dádivas de la dictadura, creando un verdadero infierno sobre la tierra», finalizó.
Tras la jura, Argentina reiteró su reconocimiento a Edmundo González Urrutia como “el legítimo presidente electo de la República Bolivariana de Venezuela”.
La tensión entre ambos países escaló hace un mes, cuando el gobierno venezolano detuvo en la frontera al gendarme argentino Nahuel Gallo, al que acusa de espionaje y terrorismo.
Las Madres de Plaza de Mayo, con Maduro
La asociación Madres de Plaza de Mayo respaldó a Maduro y le deseó fuerza para enfrentar “la planificación perversa de EE.UU. y sus proyectos de sometimiento a los pueblos latinoamericanos”.
Destacó además la importancia de “una Venezuela fortalecida con su pueblo activo para la tan esperada unidad latinoamericana” y apuntó contra EE.UU.: “Como decía Simón Bolívar: ‘Los Estados Unidos parecen destinados por la providencia para plagar la América de miseria en nombre de la libertad’”.
Además, dos ex embajadores kirchneristas, Alicia Castro (Venezuela) y Carlos Raimundi (OEA), asistieron a la ceremonia de reasunción de Maduro.
Castro dijo que “con el bravo pueblo venezolano no pudieron, ni podrán. El honor, nuestra historia y los recursos naturales de nuestra hermosa Tierra suramericana, nos pertenecen».
Y Raimundi denunció que “Venezuela es un país bloqueado al que no se le permite negociar con el exterior. Hay que levantarle las sanciones”.
Maduro, el ex chofer de ómnibus
El presidente, de 62 años, que se inició como sindicalista de los choferes de ómnibus, llegó al poder de la mano de Hugo Chávez, quien lo designó sucesor el 9 de diciembre de 2012, cuando viajó a Cuba a operarse de un cáncer.
El 5 de marzo de 2013, Chávez murió a los 58 años, tras dos años de lucha contra el cáncer y más de 13 años al frente del país, tras lo cual asumió Maduro, de quien era su vicepresidente y antes había sido canciller.
Nueve días después de la muerte del líder, Maduro ganaba las elecciones presidenciales por un estrecho margen sobre el opositor Henrique Capriles.
El líder chavista fue reelegido en 2018, en unos comicios boicoteados por la oposición dura, que derivaron en una serie de sanciones económicas y comerciales de Estados Unidos, orientadas a desalojarlo del poder.
Finalmente, llegamos a las elecciones del 28 de julio de 2024, donde derrotó a González Urrutia con el 51,95% de los votos. Y obtuvo su tercer mandato, el cual juramentó este viernes.
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