En la jerga periodística se conoce con este nombre el momento previo a la entrega última del material a difundir.
Cuando en un diario las rotativas no pueden esperar más, cuando en televisión se presenta el noticiero, o cuando ocurre lo propio en una radio, la hora de cierre es cuando el periodista no tiene más tiempo, es cuando la trascendencia del hecho se va a transformar en noticia.
Los que leen esta columna dominical se habrán extrañado la no aparición tempranera como es habitual. Más de uno habrá entrado a nuestra página para saber que opinábamos de lo que dejó el G20.
Primero vamos a hacer una confesión profesional.
El título del sábado era “llorar es un sentimiento, mentir es un pecado”. Referido a aquella frase sentencia de Saúl Ubaldini en respuesta al presidente Alfonsín, cuando en mayo de 1985 decía textualmente: «Los problemas que agobian a Argentina no vamos a resolverlos con llorones que se ponen frente al pueblo para decirle que hay que cambiar la economía o que el Gobierno se vaya. Alcanzaremos la solución de nuestros problemas aunque algunos mantequitas estén llorando y quejosos»
Por ese entonces el presidente radical venía de una inflación en 1984 del 700% y cuando había tomado el poder era del 131%
A lo que Ubaldini le contestó en un acto multitudinario que llorar era un sentimiento y mentir era un pecado. Alfonsín se fue seis meses antes con una inflación nunca vista en la historia: 3000%. Había llegado a la presidencia recitando el preámbulo de la Constitución y no terminó su mandato.
Cuando Macri se emocionó en el Colón nos vino rápidamente a la memoria la frase de Saúl Ubaldini.
El sábado a la noche el título era otro: “Arde Paris” y cada uno de los dueños del mundo con sus propios problemas.
El domingo a la mañana el título era: “Tregua de 90 dias entre Estado Unidos y China, los dueños del 40% del PBI mundial.
El título de hoy al mediodía era “Hablando en chino” para tratar de explicarle a Xi Jinping que la frase que él utilizó no pertenece al presidente Domingo Faustino Sarmiento, sino a Antonio Machado, cuando el sevillano publicó en 1912 “Campos de Castilla” y de donde el chino sacó la frase que algún libro masón que leyó le hizo creer que era de Sarmiento, cuando dijo en la conferencia “El famoso político y educador argentino Faustino Sarmiento dijo: que el camino se hace al andar…”, frase que jamás pronunció.
Aquí podemos aplicar ese proverbio chino que dice si una cosa tiene solución para qué preocuparse, y si no tiene solución ya, para qué preocuparse.
Y fue así que basado en el pensador chino hacemos esta breve entrega, porque es imposible abarcarlo todo hasta que no trascienda lo que firmaron en los distintos acuerdos bilaterales.
Lo que prometemos analizar exhaustivamente en futuras entregas.
Pero una cosa tiene que tener en claro el pueblo argentino, la conferencia de prensa del cierre del G20 de Macri es el inicio de su campaña para la reelección.
Cuando el presidente habla de abrirnos al mundo lo que está en riesgo es la soberanía política, territorial y jurídica de los acuerdos que el país pueda firmar. A Macri no lo sostiene el voto argentino. A Macri, para la reelección, lo sostiene el poder mundial. Y esto es lo que cambió en la política nacional.
Reivindico acá al colega de Diario Popular que fue el único que le preguntó a Macri sobre la obligación constitucional de defender la soberanía de Malvinas con Teresa May.
La casualidad no existe. Tony Blair llegó con De la Rua. Teresa May llegó con Macri. Y la máxima inflación de Argentina en 1989 fue con Alfonsín. Que sepamos, en los tres casos, estaban los radicales.
Llegó la hora de cierre. Acá terminamos. Solo por hoy.
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