El delegado gremial de la planta de Pacheco, Jorge Penayo, destacó que “nunca hubo una crisis como esta” y precisó que “el 2026 puede ser dramático”.
La empresa multinacional Mondelez, que elabora marcas como Oreo, Terrabusi y Milka en la localidad bonaerense de Pacheco, decidió interrumpir la producción del 14 de diciembre al 5 de enero y otorgará licencias a sus 2300 trabajadores.
El delegado gremial y ex candidato a secretario general por la Lista Unidad en el STIA, Jorge Penayo, destacó que hace 30 años que trabaja en la planta y “nunca hubo una crisis como esta”.
Explicó que “la empresa está sobre stockeada y aduce que no se va a producir porque han caído mucho las ventas”.
En ese marco, Penayo, que también es dirigente de la Corriente Clasista y Combativa (CCC), señaló que durante la primera semana van a ocuparse de ordenar y limpiar, en la segunda tendrán vacaciones y en la tercera la empresa pagará licencias al 100%.
Precisó que “lo preocupante es que si esto no repunta la fábrica quiere suspender a los trabajadores por un artículo que los cubre en caso de caída de las ventas”.
Penayo expresó que “estamos con mucha angustia porque hay incertidumbre” y añadió que “nunca hubo antecedentes de esta naturaleza. En la crisis de 2001 nos dieron una semana, pero porque tenían miedo de que la planta fuera saqueada, ahora el problema es que está sobre stockeada”.
Además, Penayo aseguró que en Mondelez “aumentaron muchísimo los precios y con la recesión que hay no sé dónde vamos a parar. Esto está pasando en muchas firmas y si no repunta se vienen los despidos”.
Se profundiza el modelo del ajuste
La medida adoptada por Mondelez se suma a una lista que crece día a día de suspensiones, cierres y reordenamientos productivos en distintas empresas a medida que avanza la gestión de Javier Milei. El modelo económico del ajuste se profundiza y el gobierno desestima la profundización de la crisis social. Ante esto, crecen las protestas en las calles de todo el país. La respuesta es una sola: represión como sucede todos los miércoles en las inmediaciones del Congreso con los jubilados, desocupados y precarizados.
Penayo explicó que “la producción cayó unas 13.000 toneladas respecto del plan anual (de 72.000 toneladas previstas) y los volúmenes de ventas no alcanzaron para justificar la continuidad inmediata.
El secretario general del STIA (Sindicato de Trabajadores de la Industria de la Alimentación), Sergio Escalante, dijo que “tras duras negociaciones se acordó que los trabajadores que prestaron conformidad se toman una semana de vacaciones y se le otorgará otra semana de licencia paga”.
Sin embargo, Penayo sostuvo que estos acuerdos no despejan la incertidumbre sobre el futuro inmediato.
La empresa ya dejó trascender que, según sus consultorías, el año 2026 podría ser “muy dramático” en términos de ventas.
“El problema acá va a ser cuando regresemos todos de vacaciones y no hay producción, ahí vamos a estar complicados”. enfatizó Penayo.
Escalante puntualizó que “esta situación es un claro resultado de las políticas del gobierno de Javier Milei, que están provocando la caída del consumo, la producción y el trabajo, mientras promueve el derrumbe de la clase media”.
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